“Un entrenador que tuve en el instituto me dijo que dejara de perseguir las metas de los otros y me centrara en las propias… “ (Michael Jordan, un mito viviente del baloncesto NBA)

Cuando nos centramos en nuestras propias metas y objetivos empezamos a ser nosotros mismos. En ese momento dejamos de ser lo que la familia, cultura y sociedad quieren que seamos. Este proceso nos acaba conectando con nuestra finalidad.

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