El tema del Mapa de la Realidad es de una importancia extrema, y por descuido se me estaba quedando en el tintero. Empezaremos por una definición del Mapa que hace la gente de la PNL, porque realmente por ahí es por donde van los tiros:
“Se le llama Mapa a la percepción individual y mental que tiene una persona del Mundo. Este Mapa Mental se conforma a través de los filtros personales por los cuales cada uno va asimilando el Mundo y la Realidad. Me refiero a la educación, la cultura, las creencias, en fin, todas las experiencias y manera de observar que desarrolla una persona, así como de las Percepciones y sentimientos de sus propias vivencias a través de sus propios filtros de la Realidad.”
Hecha esta definición, añadiremos que cada uno de nosotros tiene su propio Mapa de la Realidad donde va encajando todo aquello que le sucede, todo aquello que experimenta, todo aquello que siente, que vive, que Percibe, en suma toda Información que recibe. Porque en el fondo todo aquello que provoca en nosotros un estímulo no es sino información que recibimos por cualquier canal posible, y es más, mucha de esa información la recibimos y la procesamos sin darnos cuenta de ello a nivel consciente. Ante cualquier experiencia de la Vida almacenamos mucha más información de la que aparentemente aprehendemos a nivel consciente. Cuidado con esto último porque es una de las Claves de la Realidad.
Pero no divaguemos, estábamos hablando de los Mapas de la Realidad. La importancia del Mapa es crucial para poder integrar, de una manera que nos resulte positiva, cualquier estímulo Mental recibido. Pondremos algún ejemplo sencillo de entender: en ciertas sociedad tribales, el paso de la infancia a la madurez adulta se hacía a base de un hecho traumático. Los adultos llegaban a la choza del adolescente, lo arrancaban a golpes de los brazos de su madre, y se lo llevaban a una choza donde le hacían pasar las mil perrerías. Generalmente quienes hacían esto eran el padre, los tíos, los primos de la “víctima”. (Ver C.G.Jung para ampliar detalles sobre este asunto). Entre ciertas tribus indígenas norteamericanas, era también habitual el enviar al muchacho (futuro adulto) sólo con un arco y una flecha, sin comida, a pasar tres días con sus respectivas noches solo en el bosque. Imaginen el shock mental de los adolescentes ante estos hechos.
Bien, imaginen ahora que se le hace lo mismo a cualquier adolescente de nuestra época. Las diferencias pronto se harán evidentes: los jóvenes de esas sociedades tribales volvían de la experiencia en un estado de madurez que había dejado atrás la niñez. Se habían convertido en adultos y como tales actuarían a partir de ese momento en su sociedad. En la nuestra, los jóvenes volverán traumatizados y seguramente desarrollarán desequilibros psíquicos que les perseguirán durante el resto de sus vidas. ¿Son los jóvenes de las sociedad tribales más fuertes mentalmente que los de hoy en día? Nah, no creo en el mito del Buen Salvaje. ¿Cuál es la diferencia entonces? La diferencia es el Mapa de la Realidad que unos y otros tienen en su Mente, y donde encajarán (o no) su experiencia.
Los jóvenes del siglo XXI se encuentran, tras la experiencia, con una pieza que no encaja en absoluto en su puzzle mental. No hay manera de integrarlo. De ahí al desequilibrio psíquico de cabeza. Los jóvenes de esas sociedades tribales saben perfectamente dónde encajar la pieza, qué significado tiene, el sentido de todo ello, y armoniosamente sitúan en su Mapa aquello que les ha pasado, porque SU MAPA TIENE UN LUGAR DONDE SITUAR LA EXPERIENCIA. En ciertas sociedades antiguas, el “zumbao” era el Chamán de la tribu, o el Visionario, y hoy en día los encerramos en manicomios diagnosticándoles vaya usted a saber qué enfermedades mentales. Porque no tenemos un Mapa de la Realidad donde encajar los comportamientos y las visiones de esos Seres Mágicos, los condenamos al estigma de la enfermedad mental.
Repitiéndome:
“Mirad, en la Experiencia Humana no hay Nada que signifique FORZOSAMENTE algo, así que Puedes hacer que signifique LO QUE TU QUIERAS”.
John Grinder y Richard Bandler, Hipnotizadores.
Y volviendo a citar a los que manejan la PNL:
“Así, cada uno de nosotros va construyendo, más o menos conscientemente, su propio Mapa de la Realidad y a éste acudimos cuando el entorno en el que nos movemos demanda una acción o algún tipo de respuesta de nuestra parte. Los Mapas se pueden completar con nuevos datos, se pueden corregir generando opciones nuevas, se pueden abrir a nuevas posibilidades más enriquecedoras de interpretar e interactuar con el Mundo.”
Y esto último es la Clave y es donde yo quería llegar. Es Absolutamente Imprescindible que ampliemos tanto como podamos nuestros Mapas de la Realidad, porque de esa manera cualquier experiencia, sea subjetivamente buena o subjetivamente mala, servirá para enriquecernos. Es Absolutamente Imprescindible que tengamos un sitio donde encajar con naturalidad cualquier pieza que caiga en nuestras manos a lo largo del Juego, a lo largo de la Vida, porque de esa manera recuperaremos nuestra condición de Seres Mágicos. Vivimos en una sociedad Arcóntica donde se impone el Pensamiento Único, una única manera de interpretar la Realidad, donde las opciones que se nos ofrecen son escasas, donde las limitaciones para nuestra Mente están por doquier, donde se nos estrechan los Túneles de Realidad hasta niveles insospechados. Eso nos convierte en pedazos de carne fácilmente programable y manipulable, y nos hace presas fáciles del desequilibrio emocional. Ñam, ñam, se relamen Algunos…
Pero por mucho que me digan los Pajarracos, yo voy a ser el Rey León… y ellos lo van a ver.
Ampliar tu Mapa de la Realidad es un trabajo constante que hay que hacer todos los días. Usemos para ello la Fuerza de la Duda, usemos para ello el Cambio de Perspectiva ante cualquier cosa, usemos para ello las Preguntas, usemos para ello la Capacidad de Asombro, usemos para ello el Humor, usemos para ello la Imaginación. Nuestra Mente lo agradecerá y nuestra habilidad en el Juego aumentará sobremanera, y con ella nuestra Diversión.
VISTO EN http://soloquierojugar.wordpress.com
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